Profesionalizar y difundir el emprendimiento cultural es el día a día de Marcela Vargas

El compartir conocimientos es uno de los motores que mueve a Marcela Vargas para dedicarse a la enseñanza, aunque con un poco de reserva en un principio, ahora su dedicación le deja todos los días un buen sabor de boca, el saber que compartió conocimiento y que ayuda en el crecimiento de más personas.

En la actualidad, Marcela se dedica a dirigir el Programa de Empresas Culturales y Creativas Veracruzanas dentro del IVEC (Instituto Veracruzano de la Cultura) y dentro de ese programa se brinda capacitaciones a jóvenes y adultos enfocados en el tema del emprendimiento cultural.

Como la mayoría de los proyectos y trabajos a nivel mundial, el programa de Marcela migró a la modalidad virtual, dar el paso en esa dirección ha sido un completo reto; ¿lo han logrado? Sí, pero ha sido complicado para todos acostumbrarse a la nueva modalidad.

Por otra parte, en el tema de emprender como artistas y gestores estamos más acostumbrados a compartir la cultura haciéndolo con el corazón pero se debe difundir la cultura, expandiéndola a nuevos lugares, para así también poder vivir de ella de una manera digna y eso es profesionalizando a los músicos, manufacturas etc.

En este momento, Marcela cree que todas las áreas involucradas en la cultura dentro de su Estado están dando pasos en los que se puede ir creando un gran camino abierto para todos, que todos puedan avanzar a pasos agigantados una vez que se ha encontrado la manera, ya que ha sido muy importante el cambio de paradigma social en cuanto a la cultura y a la creatividad y de esa manera todos están trazando el sendero.

El Mercado de Empresas Culturales y Creativas Veracruzanas dio gran proyección a su labor

El Estado de Veracruz tuvo una proyección muy importante después de una actividad llamada El Mercado de Empresas Culturales y Creativas Veracruzanas, lo que es más satisfactorio después de eso es que ahora dentro de su portafolio de creadores culturales cuentan con participantes de otros países y mejor aún, participantes del sureste de México, Marcela lo cuenta gustosamente ya que con esto, asegura, tendrán más vínculos con otros estados y países como Argentina, Chile y Colombia y eso les hace ver las posibilidades económicas que tiene la cultura y la creatividad para el desarrollo social.

Generar las fuentes de ingreso para músicos, versadores, decimistas y gente dedicada a la cultura, instruyéndolos en el camino de la formalización de la propiedad intelectual es la labor de Marcela. Es por esa razón que creemos que es una agente de cambio, ya que fortalece las uniones entre el sector cultural y creativo, vincula proyectos para que la colaboración concluya en propuestas más completas y generen mayores ingresos a todos los involucrados, qué mayor satisfacción que vivir de lo que te gusta y más aún si lo que te gusta es difundir la cultura de tu región o ciudad.

La principal cualidad y valor para trabajar en el área cultural es escuchar antes de opinar y de ahí partir en generar estrategias.

Los valores son para Marcela los pilares de su día a día, el empatizar con la gente que la rodea, el dialogar, escuchar antes de opinar es indispensable para todos los aspectos de la vida y posteriormente proponer, es la estrategia de cambio que Marcela utiliza dentro del Programa de Empresas Culturales y Creativas Veracruzanas.

El consejo que ella daría a otras personas involucradas en la agencia de cambio como profesores sería: “Tenemos dos oídos, dos ojos y una boca y eso se debe a que en esa proporción tenemos que conducirnos ante los demás; escuchar y ver dos veces antes de hablar. Esa es la medida en la que se debe entablar la comunicación. Escuchar bien, ver bien y hablar menos, antes de proponer una solución debemos escuchar y saber qué está sucediendo”.

Marcela nos da un gran ejemplo de amor a las raíces de nuestro país, es momento de rescatar nuestra identidad como pueblo, que nuestra cultura sobreviva ante la digitalización e incluso la globalización de la que no podemos aparatarnos para seguir en el camino de la modernidad; pero nunca sin perder de vista nuestros principios ancestrales y nuestra vasta y rica cultura. Ojalá en este camino de la transformación nos topemos con más personas preocupadas y ocupadas en la cultura como Marcela en Veracruz.